Tal y como se esperaba, el FC Barcelona pasa a cuartos de final. El partido ha terminado 3-1 para los azulgrana, que en la primera parte tenian el balón, y tocaban y tocaban, pero no tiraba a puerta con peligro. Tan solo dos ocasiones claras. La primera, un tiro de falta botado por Dani Alves, que provoca la lesión del meta Szczesny por el español Almunia, y el gol de Leo Messi, en el minuto 3 de la prórroga, elevando el balón por encima de Almunia y rematando a placer. La tangana formada por una pelea entre Abidal y Van persie, provoca que el holandés haga una falta provoca por la rabia a Alves y se gane la primera amarilla. Después de esto fue cuando llegó el gol y se motivó el Barcelona. En la segunda parte se marca gol en propia puerta el conjunto catalán. La jugada, un córner, hizo que tres jugadores del Barcelona se pelearan por el balón en el aire, y uno de ellos lo introdujera en la portería. Esto daba opciones y volvia a meter en el partido al conjunto Londinense, pero tres minutos más tarde, fue cuando llegó la polémica. Van Persie, que recibe un balón en carrera, pero en fuera de juego, continúa la jugada un par de pasos más y tira a puerta, algo que puede llegar a ser normal, pero el árbitro no lo entiende así y le enseña la segunda amarilla, lo que provoca la expulsión y el cambio del rumbo del partido. A partir de ese momento el barcelona fue superior en todos los aspectos y sólo se empañó con una espectacular actuación del meta español Almunia. Un partido marcado por la polémica y el dominio culé.